... De la puerta de atrás y eso

¡El sábado cumplí uno de mis sueños de mini-adolescente!

¡Por fin pude ver en directo a Extremoduro! ... Ufff... aún me cuesta perder la sonrisa cuando me acuerdo del concierto y de la sensación de estar allí... Vereis, yo descubrí Extremo un poco tarde. Ya no tenía ni 15 ni 17, más bien me empezaba a acercar a los 20. Era de otra época, más cutrilla, menos glamurosa. En mis cintas habia algo de Leño (unas dos canciones), alguna equivocada de Manolo Cabezabolo y mucho Siniestro Total y similares... Todo más viejuno y menos chic. O al menos esa era mi sensación de eterno extranjero adaptandose a los gustos de turno. Pensad que desde los 16 me tocó aprender qué era eso de la música catalana y ver qué grupos se movian por estos lares.

El caso es que gracias a dos grandes personajes de mi vida, descubrí Extremo y me enamoré de unas cuantas de sus canciones. Maldije en arameo antiguo el perderme el concierto al que se fué mi señora de por aquel entonces (una de las introductoras de Extremo) aunque lo llorón que fuí me valió una camiseta de regalo :P

Desde entonces yo y mi camiseta hemos llorado por los rincones incapaces de asistir a ninguno de los conciertos que han dado por las españas... incapaces hasta este sábado...

Durante unos buenos ratos se me olvidó todo menos la música y la alegría de estar allí compartiendo el momento con amigos de los buenos. Por 27 o 30 instantes me lo pase como un niño de teta en Navidad. Ni siquiera los 27 tazos de entrada, la espera a las puertas, el retraso preceptivo en el comienzo, la capitalización de la industria de la birra y el puñetero recinto del forum consiguieron que me lo pasara malamente. El Robe andaba a la suya, cantando, y yo allí abajo, dejandome la garganta y recordando fiestones en blanco y negro mientras miraba de reojo a los colegas en los momentos más sentimentaloides.

¿Mi única pena? Pues que el disco nuevo no me acaba de triunfar y se dedicaron a tocarlo quitando tiempo y gloria a canciones como "La vereda de la puerta de atras". Ojo, que el nuevo no es que sea malo... solo es menos Extremoduro.

Pero ya se sabe, a mi edad todo lo de antes es más guay y, para los que comen de esto, la única regla es renovarse o morir. Al menos fuí a este y no al de Aranda.